La palabra parece tan volátil
y frágil como un suspiro lanzado a una corriente de aire, tan simple que
desaparece entre todas las descripciones que conforman lo que es la “escuela”.
¿Qué haríamos sin estas estructuras
arquitectónicas?, no sólo cumplen la función de llevarnos de un lugar a otro,
como las arterias, la sangre en el cuerpo. No solo son esos conductos por los
cuales transitan los habitantes de los grandes edificios de mi escuela,
edificios que se alzan hacia el cielo como imponentes centinelas. Quizá, por la
palabra “pasillo”, entendemos “sólo de paso”. Pero no, hay algo más profundo en
su significado.
Esta compleja red geométrica de concreto,
acero y azulejos que te pierde la primera vez que rondas en ella pareciera que,
al detenerse un momento entre sus envolventes formas y prestándole un poco de
atención, puede en uno revivir todo aquello de lo cual ha sido testigo
inminente: de esos bohemios amantes que se detienen un momento, poco antes de
iniciar su clase, para demostrarse su amor con un fugaz pero cálido beso; de
esos trovadores que se dan un momento del día para ejercer su arte y oírlo
resonar entre las paredes de los salones, unidos como los acordes de una
guitarra, fielmente consecuentes uno de otro; de las lágrimas rodantes en las
mejillas de esa chica y ese chico que terminaron lo que hace tiempo iniciaron; de esas pláticas
escuchadas desde el principio de su existencia. Estas obras que, a lo largo del
tiempo, son esculpidas por nosotros, permanecen fieles, conservadoras e
inmutables, cual fuente de sentimientos y recuerdos absorbidos, tal y como la
flor blanca cede ante los colorantes del agua que la alimenta y se postra a
merced de como éstos la cambian.
Detenernos
a escuchar esas silenciosas voces que nos hablan, mientras rondamos en sus
entrañas es tan sencillo como dejar que nos cubran con su velo de experiencias
y visiones… Sólo hay que detenernos a oírlas y, así como el dulce sonido de un
ruiseñor entre el tumulto de la ciudad, podremos distinguir sus deleitantes
voces.
Artemio
Gandez
Grupo 510